A veces extraño mi cuerpo de niña. No es que mi mente lo agradezca, pero ahora a veces se va con la marea; no es siempre, es a veces, con cargas y ciclos más maduros y sin completar. No es que quiera volver atrás, pero es que quiero que dejes de comentar.
A veces sólo hay un tiempo; a veces los pedacitos del mismo.