Mis planes provisionales se han convertido en una larga y punitiva prórroga, ese síntoma de persistencia a lo que tú llamas abandono.
El problema no es no ser atípico; el problema es la insistencia en que serlo, y sobre todo, ejercer como tal es lo único válido. Así gobierna la psicopatía y así se da de bruces el pensamiento crítico, en su obstinada naturaleza de ser genuino.
Aunque resucites cientos de veces, de igual manera podría venir alguien describiendo todas la única muerte que conoces y la única muerte a la que temes, en el extenuante debate entre elegir conflicto interno o externo, aunque este último sea ambos a la vez.